(Parte I)
(Parte II)
Hasta hoy he dedicado dos entregas a explicar los antecedentes de los libros-panfleto editados por la Asociación Puente de los Santos, bajo la presidencia del Sr. Alcalde de Ribadeo. Vamos a comentar hoy el contenido de dichos libros.
En las entregas anteriores he tratado de poner en evidencia el interés, casi obsesivo, de la clase política asturiana por mantener en vilo el asunto Ría del Eo vs Ría de Ribadeo y la manipulación para sustraerlo de una simple cuestión topográfica.
¿Qué significado tiene, en este contexto, que a mediados de Mayo de 2.009, la Asociación Puente de los Santos y el CEDER Oscos-Eo editen los libros que aquí se comentan, teniendo en cuenta que uno de ellos se titula “La ría del Eo, etc”?. Evidentemente esta edición es continuidad de la política anterior y persigue consolidar en la administración pública la rebeldía ostentosa del presidente del gobierno regional asturiano y no solo eso sino llevar a las escuelas, a los profesores a los padres y a los alumnos la prueba documental de que firmes ellos en la defensa de los valores patrios aquí se va a decir y escribir Ría del Eo por melindres y que además se cuenta con el apoyo del alcalde de Ribadeo, por si hubiese alguna duda.
Veamos algunos textos y contenidos del libro-panfleto.
Como introducción señalemos que en la ría sólo desemboca el Eo. El Suarón, Monjardín, el Rio Grande y el Berbesa no existen. Sin comentarios.
Página 11, párrafo segundo: “…el mar se adentra separando Asturias (donde se conoce como Ría del Eo) de Galicia (llamada allí Ría de Ribadeo).
Comentario: Obsérvese la manipulación, se olvida la tradición cartográfica, se obvia el acuerdo de la CENG y se transmite el mensaje de que hay dos nombres para uso alternativo según los gustos o afinidades locales.
Página 12 y otras: “… berberechos, almejas, navajas, se cuentan por miles en pocos metros…”.
Comentario: No hay la más mínima referencia a los cambios habidos en las especies de moluscos y otras en los últimos años. Cómo veremos en otros apartados es una descripción “de libro” en el sentido de libresca. No hay ningún análisis concreto de la evolución y situación actual de la ría y de las espcies que sobreviven. En el momento actual es falsa la afirmación de que hay miles de ejemplares de las especies citadas “en pocos metros cuadrados”. La realidad es que sólo hay unos pocos ejemplares de dichas especies en varios miles de metros cuadrados. Lo sabemos todos, menos el autor, los editores y los políticos promotores.
Página 13: Párrafo segundo. Se enumeran las normas de protección de la ria, de rango autonómico, estatal e internacional, pero se omite la declaración de Espacio Natural Protexido en Réxime de Protección Xeral, de la Xunta de Galicia.
Comentario: El autor se ha molestado muy poco en buscar información sobre el particular, fácilmente accesible en la red. El alcalde de Ribadeo no se ha preocupado lo más mínimo de asesorarse para revisar el texto.
Otro comentario: La inclusión de la ria en la Red Natura 2.000 no se debe sólo a la declaración de Zona ZEPA, sino también a otros criterios (praderas de Zostera Noltii, formaciones dunares submarinas, etc). De todo ésto no se menciona una palabra en el libro-panfleto que comentamos. En mi modesta opinión, si los técnicos de la UE consideraron relevantes estos elementos, debería resaltarse en un libro dirigido a las escuelas. Lo cual nos conduce a otra cuestión: ¿Quién y con que criterios encargó este libro?. ¿Cuáles fueron las directrices generales del encargo? ¿Un libro de fotos? ¿Un libro que analiza la problemática real de la ría? ¿O un libro de propaganda?. Este es el nudo gordiano de la cuestión para quien lo quiera entender y haya tenido la paciencia de llegar hasta aquí.
Página 13: La introducción está datada en octubre de 2.008, ocho meses después del acuerdo de la CENG. No nos vayan a salir con que el libro fue redactado antes de dicho acuerdo.
Pagina 15, edición en lengua gallega, línea 16 y 17: “… a ría e esteiro do Eo…”. Es decir no se ha respetado la fórmula “ría de Ribadeo”.
Página 18, “De la erosión y sedimentación”, se describen los fenómenos de erosión y sedimentación sin citar ninguno de los rios antes mencionados, además del Eo. Se olvidan las grandes avenidas del Suarón y sus más que probables efectos erosivos y sedimentarios.
Página 32: Dedica 20 líneas a describir el molino de mareas de A Lieira y menciona un proyecto de restauración del mismo. A continuación aparece el siguiente párrafo: “Existen ruinas de otro molino en la ensenada de a Vilavella, en la costa lucense”.
Comentario: El autor no se ha molestado lo más mínimo en documentarse sobre la situación del molino de As Aceñas, que no está ni estuvo nunca en A Vilavella. El Sr. Alcalde de Ribadeo no se ha molestado lo más mínimo en revisar o encargar que se revisara el texto, siempre aceptando la versión más favorable. Por cierto, el molino de As Aceñas también tiene un proyecto de restauración.
(Página 102, versión en lengua gallega: “…a ría e esteiro do Eo…”. Ya comentado más arriba.)
De todos modos, los detalles concretos antes mencionados, desde mi punto de vista, no constituyen la principal carencia de este libro, sino el hecho de que se dedican docenas de páginas y centenares de fotografías (la calidad del material y la presentación son magníficas, no se ahorrado un duro, como corresponde) a describir las corrientes, las mareas, la erosión , la sedimentación, las aves, los moluscos, las plantas etc, pero el hombre no aparece por ninguna parte. No hay ni una sola linea, excepto una alusión colateral en la página 134, que haga referencia a las actividades antrópicas, su afán depredador, los daños causados, el puente, la escollera, los rellenos, los emisarios rotos, la contaminación química, los revoltijos de hierros, los cambios en los canales y tesones provocados por las obras, etc. etc. etc. Este es un libro que presenta una ría de que no existe, una ría de ficción y que pretende llevar a las escuelas una imagen falseada y manipulada a mayor gloria de los promotores.
Lo mejor que se podia hacer con estos libros-panfleto sería retirarlos de la circulación y de paso aclarar la reata de beneficos que han ido dejando por el camino.
Evaristo Lombardero Rico