Como foi anunciado, o sábado á tardiña foi presentado o libro ‘Galicia y la Masonería en el siglo XIX’. Deixo unha foto do salón antes do comezo do acto, o resume e o vídeo do mesmo (falta un pouco do final), así como a ligazón á web do libro e ós datos do autor:
Vista do salón de alcaldes antes de comezar o acto. |
La masonería contemplada y analizada por medio de la escrutadora y
objetiva mirada de un investigador ajeno completamente a ella, como es
el caso del profesor Valín, resulta algo así como una curiosa y,
paradójicamente, atractiva forma de sociabilidad pluridimensional ―como,
en realidad, lo ha sido, siempre, para mucha gente y a lo largo de los
tres últimos siglos―, dado que encierra en sí misma toda una serie de
categorías que la pueden definir, de una manera sencilla, como una
optimista asociación, con una originaria e infantilmente cándida pulsión
fraternalista cien por cien masculina, de profundamente
comprometida y juramentada carga mutual, de reglamentada práctica de
democracia interna, con una declarada ambición por ser pedagógica, familiar,
tolerante, socialmente cohesionadora y en cuestiones de religión
sincréticamente deísta y con un teórico corpus discursivo entre
filosófico y cosmogónico explicado por medio de la gradual aprehensión
de una suerte de gnóstico conocimiento que va a utilizar, con el fin
entre otros de unir para siempre a sus miembros entre sí, los típicos
ritos de paso, por medio de secretas, psicodramáticas e íntimas
ceremonias preñadas de alegorías y crípticos símbolos, y que llega a
interiorizarse en la vida del iniciado, acompañándolo y socializándolo a
lo largo de toda su existencia como una suerte de reconfortante,
protectora y civilizadora “religión de sustitución”. Puede
decirse que esta discreta sociedad fue la primera religión secular o
moderna de la historia, adelantándose e influyendo en otras tan
conocidas como el liberalismo, el anarquismo y el socialismo, porque,
desde su nacimiento en 1717, puede entenderse como la legítima hija
primogénita del fenómeno ideológico conocido por “El Siglo de las
Luces”. Representando desde entonces para la historia de la humanidad el
papel de ser un importante fenómeno social “interclasista” con la
utópica pretensión, claramente política, de mejorar progresivamente al
mundo por medio de su pacífico, reformista, complaciente y
místico apostolado; actuando como una especie de transgresora, elitista y
reservada “colmena” internacional de cosmopolitas y cultos influencers
creadores de un determinado y subversivo estado de opinión,
desenvolviéndose, de una forma demoledoramente desestabilizadora para el
rígido sistema del Antiguo Régimen, entre aquellas primitivas, aunque
nada reducidas, redes sociales de la “elegante” gente formada, curiosa,
abierta y, por ello, heterodoxa en cuestiones de índole política,
filosófica y, obviamente, religiosa.
Con Galicia y la masonería en el siglo XIX, tanto el lector
aficionado por estos “escondidos”, esotéricos y atractivos temas como el
investigador académicamente profesional se van a encontrar,
sorprendentemente, con un ameno libro de fácil lectura que les
desvelará, además de cómo se desenvolvió y, en realidad, se desenvuelve
la intrahistoria de esta “silenciosa” y oculta sociabilidad, todo un
conjunto de trascendentales precedentes históricos de capital y profunda
importancia para la historia universal y, obviamente, para la nacional,
partiendo, desconcertadamente, del ejemplo ofrecido por un país
geográfico tan esquinado como poco extenso como es Galicia. Todo un
elocuente acervo de demostrativos precedentes indicadores universales de
amplísima trascendencia como, por ejemplo: la utilización política y
revolucionaria, demostrada por primera vez, documentalmente, en la
historiografía universal, de dos logias, curiosamente gallegas, al
“trabajar” estas como auténticos “partidos de vanguardia” conspirando y
haciendo triunfar, gracias a su bien llevado complot clandestino, la
insurrección armada de 1820 contra el cruel régimen de Fernando VII,
ofreciéndole entonces al mundo un paradigma de cómo llevar a cabo,
victoriosamente, una nueva técnica de golpe de Estado para subvertir
aquel estatus internacional salido del Congreso de Viena en 1814; la
internacionalmente adelantada experiencia de feminismo masónico llevada a
cabo por una logia ubicada en pleno y retrasado medio rural gallego que
se adelantó en varios años al hiramismo feminista universal de la
conocida Orden Masónica Mixta Internacional-Le Droit Humain fundada en
París en 1893; cómo desarrolló el masonismo gallego una directa,
incansable e implacable lucha laicista contra la dogmática, omnímoda y
excluyente cerrazón política y religiosa llevada a cabo por el
influyente poder de la Iglesia católica; cómo se incardinó esta sociedad
secreta en la conspiración del movimiento revolucionario federal
español con el arquetípico ejemplo de la insurrección armada de Ferrol
de octubre de 1872; cómo la masonería formó, por medio de su pedagógica
enseñanza integral, a las primeras bases del importante movimiento
obrero marxista de Galicia y, obviamente de España; y todo un larguísimo
etcétera de reveladoras consecuencias culturales, identitarias y
políticas.