A renovación do porto das Figueiras mantén opinións diversas. O que segue, recibido esta mañá, é un chamamento ó diálogo.
A LOS VECINOS DE FIGUERAS. DIÁLOGO, DIÁLOGO, DIÁLOGO.
(Nota de prensa de BioEo)
Hemos conocido el resultado de la asamblea de la Asociación de Vecinos, en cuanto se refiere al proyecto de ampliación del Club Náutico, y respetamos, por completo y sin reservas, su voluntad, aunque no hubiera una votación propiamente dicha. Asumimos que la postura de 49 vecinos de un total de los 52 presentes es favorable al proyecto del Principado. Lamentamos que la directiva no atendiera la petición del alcalde para poder presentar antes a su directiva y a los asociados el proyecto y nuestras alternativas.
Desde BioEo vemos que se confirma lo que temíamos: que se pidiera postura sin dar a conocer el proyecto. Por eso les reiteramos nuestro ofrecimiento de información toda vez que en la asamblea se habló del proyecto, pero reconociendo que no se disponía del mismo. Eso es exactamente lo que queríamos cuando ofrecíamos el diálogo a su directiva: con el proyecto sobre la mesa, analizarlo en profundidad, y poder plantear nuestras alternativas, que entendemos que son más eficaces, más rápidas en el tiempo, y con mucho menos gasto. Ofrecimos incluso asistir cinco minutos, solo para exponer nuestras alternativas, y retirarnos después, para no condicionar la libre opinión de los socios, a los que respetamos. También este ofrecimiento fue rechazado, sin que sepamos aún por qué.
Tampoco se habló en la asamblea, al parecer, de las consecuencias que una escollera podría tener para la vida en la ría, o los cultivos marinos. Nosotros contamos con la opinión de biólogos y acuicultores, seriamente preocupados por la supervivencia de esos cultivos, con la preocupación de los ornitólogos que han medido las consecuencias para la presencia de aves en la ría desde la construcción de la otra escollera, la de Ribadeo.
Contamos asimismo con el análisis de un geólogo, que desvela que el propio proyecto del Principado reconoce, en el mejor de los casos, que la velocidad de la bajada de la marea en nuestra orilla se reduciría a la mitad, lo que favorecerá sin ninguna duda la sedimentación y colmatación, dando por seguro que de no mediar dragados continuos el tesón y la escollera se fundirían. Y eso pondría en peligro la salida y entrada del puerto de Figueras salvo en pleamar, e incluso la supervivencia del astillero.
No se trata tan solo de la construcción de un muro y de la privatización del puerto, se trata de la ría, su vida, su trabajo y su futuro.
Nuestras alternativas son fáciles de describir y sencillas de entender:
-No construir la escollera, sino reforzar o renovar el dique flotante, para salvar en lo posible la circulación del agua.
-Una marina seca en terrenos municipales, que no sirva solo al puerto de Figueras, sino también al de Castropol, para que las embarcaciones de verano puedan pasar el invierno a resguardo. Recordamos que el propio alcalde ofrece para ello los terrenos de Serrasa.
-No demoler el espigón, el último resto de nuestro muelle tradicional, ni su rampa.
-Sustituir la escollera de la orilla noreste (la más cercana al astillero) por muro recto, que facilitaría, si hacen falta, muchos nuevos amarres.
-Peatonalizar y urbanizar con valla e iluminación, además de bancos, la escollera de Rapalacois.
-Exigir al Principado un mejor mantenimiento del dique flotante y los pantalanes.
Todas estas alternativas fueron valoradas como razonables en la reunión mantenida con BioEo por el propio alcalde, que nos instó a presentarlas, y han sido registradas en el Servicio de Puertos e Infraestructuras del Principado, que las está estudiando antes de emitir el proyecto definitivo de intervención en el Puerto de Figueras.
Nos hubiera gustado poder ofrecer a los socios de la Asociación estas alternativas. Se lo pidió a la directiva el propio alcalde, pero el ofrecimiento fue rechazado. Pronunciarse sobre algo que no se conoce, ni el proyecto en sí ni nuestras alternativas, es poco razonable. Queremos recordar que la escollera supone verter a la ría 120 000 toneladas de piedra, 40 000 metros cúbicos, que tendrían que atravesar el pueblo en 5000 camiones, en un cálculo aproximado. Daño para la ría, daño para el pueblo y sus calles.
Por eso, y sobre todo para evitar la fractura y división de nuestro pueblo, para buscar un consenso que no deje fuera a nadie, reiteramos ese ofrecimiento: sentarnos a dialogar con la Asamblea de Vecinos y el Club Náutico para buscar lo mejor para el pueblo, no solo para el club náutico, que no es el pueblo, ni siquiera el puerto; para poder trasladar después al Principado las conclusiones de este diálogo y, ojalá, una postura común de todos los pixotos.
Si nuestra mano fuera nuevamente rechazada, esperamos que no, instamos al ayuntamiento a que convoque a los técnicos del Principado para celebrar una asamblea popular, abierta a todos los vecinos, y no solo de Figueras, en la que nos informen del estado actual y real del proyecto, y se puedan escuchar también no solo nuestra voz, sino también la de la Asociación, el Club Náutico, y cuantos quieran aportar sus opiniones y alternativas, antes de tomar una decisión que afectará para siempre al pueblo, a la ría, y a las generaciones futuras de pixotos y ribereños. Una obra arriesgada como esta se hace en un año, pero dura ya toda la vida.
Por último queremos dejar claro que no queremos renunciar a la inversión para Figueras. Al contrario, al ser nuestras alternativas mucho más baratas, creemos que el dinero restante se podría usar para sanear definitivamente el puerto, eliminando la boca de alivio de las aguas pluviales, el dragado del puerto, la retirada de los restos de los cultivos del siglo pasado para mejorar la navegación, y cuanto haga mejor al propio puerto.
BioEo