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Os faros, a nosa cultura, as nosas cousas, nós.


falto de tempo para ir máis aló, subo dúas cousas que me fai chegar Pablo Mosquera, ambas relacionadas coa illa Pancha.

A primeira, un artigo que ten aparecido xa nos xornais:

Nuestros
faros

Entre
las siete maravillas del mundo antiguo se encuentra el Faro de
Alejandría. En la isla de Pharos para guiar la entrada de los
buques, entre el año 294 a.c y 247 a.c.. En la Alta Edad Media, Beda
el Venerable escribe De septem mundi miraculis, dónde vuelve a
nominar el Faro de Alejandría. Será el arquitecto Paolo Vitti quien
lo describe como una construcción con tres cuerpos bajo la linterna
que proyecta el fuego mediante un espejo.

Aun
recuerdo el magnífico trabajo que publicó en La Vanguardia de
Barcelona el excelente jurista Profesor Manuel Jiménez de Parga,
cuando afirmaba que los Derechos Humanos han ido incorporando
sucesivas generaciones de tales, como el derecho al patrimonio
histórico, artístico, ecológico y cultural. De tal postura se
deduce que el sujeto de tales derechos es el ciudadano y que la
administración de tales derechos es el garante ante las Cámaras
Parlamentarias en las que reside la soberanía popular.

¿Alguien
duda que los faros son patrimonio de la ciudadanía, más allá de su
función como señales marítimas? ¿Alguien duda que esos faros del
siglo XIX están íntimamente vinculados al paisaje de nuestras
costas y que su emplazamiento no es casual en la historia del
territorio por sus relaciones con la mar?. ¿Alguien puede disponer
de tales catedrales de la mar océana sin consultar con los
habitantes del territorio más allá de que su primer motivo -vigías
de la navegación- este superado por la tecnología al uso?.

En
cada faro hay una lección de arquitectura y de ingeniería. Sus
habitáculos están impregnados por la vida de los torreros y sus
familias. Su emplazamiento va mucha más lejos del histórico Plan
General de Señales Marítimas de 1847, o del trabajo de la Comisión
de Faros que contribuye a su desarrollo por emplazamientos,
calendario de puesta en escena, modificaciones y capacidad para
cumplir su objetivo como elemento preventivo de los siniestros
marinos.

De
las fogatas en islas y salientes marinos, en tiempo de navegación
próxima a la costa mediante referencias visuales, hemos pasado a la
navegación por satélite y sofisticados elementos propios del avance
en electrónica, robótica e informática. Hasta los hermosos
sextantes son piezas de museo. Ya nadie repara en el número de lados
que contiene la linterna que se alza sobre la torre, y que define
junto a la distancia del haz luminoso la categoría del vigía.
Incluso se confunden las balizas con los faros.

No
conozco a nadie que haya hecho una tesis doctoral sobre el contenido
de los libros que obraban en los faros: Diario personal de
operaciones del torrero; libro de órdenes; libro registro de
comunicaciones; libro de cuentas particulares de los efectos que
suministra el Depósito; libro de cuentas particulares de los efectos
adquiridos en la provincia; libro cuaderno de consumo y servicio de
efectos; libro cuaderno de servicio; libro diario de servicio; libro
inventario de alta y baja de muebles enseres; libro del movimiento y
consumo de aceite. La cantidad de anotaciones que diariamente
aquellos ermitaños de la costa anotaban para dejar constancia de su
observación.

Dicho
todo esto, al igual que defendemos la Basílica de San Martiño, la
Catedral de Mondoñedo, Valdeflores o Santa María del Campo, debemos
defender el Faro de Isla Pancha (1859), La Atalaya (1864), Roncadoira
(1974), La Coelleira (1864), Estaca de Bares (1850); Ortegal (1864).
Son como el Camino de la Costa hacia Compostela o San Andrés en O
Cabo do Mundo, una ruta del patrimonio histórico y cultural de la
antigua Diócesis de Britonia que funda Maeloc en el siglo VI d.c:
Son los Petos de las ánimas de pecios y marinos muertos para
recordar los naufragios de la Costa más al norte.

Pablo Mosquera Mata

A segunda, unha convocatoria:

Reunión
en San Martiño

En
diversas reuniones que hemos tenido en torno a eventos culturales, se
han puesto de manifiesto inquietudes realistas sobre el estado de
nuestra cultura en la comarca- antigua provincia de Mondoñedo-.

Somos
firmes partidarios de pasar desde la preocupación a la acción
(preocupar-ocupar). Y por tal motivo se propone una reunión
inmediata para analizar el problema y elaborar -si es posible- un
compromiso común para el próximo 2016.

Lugar
y día:

Rectoral
de San Martiño. Próximo 20 de noviembre a las 20 horas.

Temas:

Situación.

Compromisos
comunes 2016.

Declaración
sobre la ocupación de los faros.

San
Martiño y Mondoñedo: objetivos 2016.

Reunión
abierta a todo el que sea creyente… en los derechos humanos, su
tercera generación, derecho a defender y divulgar el Patrimonio
histórico, artístico, cultural y ecológico de nuestra madre Isis.

Pablo
Mosquera “Bígaro”

Pois iso. Organización non para defender algo noso, senón para defender o de todos, o común.

Nota posterior: a xuntanza convocada na segunda nota foi anulada.

Illa Pancha. Captura en http://www.bing.com/maps/

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